La Ciudad Eterna es el epicentro de la historia, la cultura y la arquitectura occidental. Con más de 2,500 años de historia, la capital de Italia ofrece una experiencia única en la que se fusionan la grandeza de su pasado imperial con el encanto del Renacimiento y la modernidad.
El Coliseo es uno de los símbolos más icónicos de Roma y el anfiteatro más grande del Imperio Romano. Es un sitio imprescindible para quienes quieren conocer la grandeza de la Roma antigua y explorar sus intrincados pasadizos.
Esta fuente barroca es un ícono de Roma y un punto popular para turistas. Lanza una moneda y pide un deseo, siguiendo la famosa tradición que asegura tu regreso a la ciudad.
El Vaticano, hogar del Papa, es un lugar de peregrinación y arte incomparable. La Basílica de San Pedro es un monumento asombroso que ofrece vistas panorámicas desde su cúpula, diseñada por Miguel Ángel.
El Panteón es uno de los edificios mejor conservados de la antigua Roma y una obra maestra de la arquitectura. Su cúpula y óculo central son maravillas que atraen a miles de visitantes diariamente.
Una de las plazas más famosas de Roma, Plaza Navona, es el lugar ideal para disfrutar del arte barroco y el ambiente vibrante de la ciudad. Está rodeada de cafés y restaurantes que invitan a disfrutar de la comida italiana.