Lyon, ubicada en el corazón de Francia, es famosa por su vibrante escena gastronómica y su rica historia renacentista. Considerada la capital culinaria del país, Lyon ofrece una experiencia única con sus "bouchons" tradicionales, mercados y un ambiente encantador en cada rincón de la ciudad.
Un viaje al pasado, Vieux Lyon es un distrito medieval repleto de calles empedradas, fachadas coloridas y tiendas de artesanía. Este barrio es un tesoro histórico donde se encuentran los famosos "traboules", pasadizos secretos que los tejedores utilizaban para moverse entre edificios.
La imponente basílica en la cima de la colina de Fourvière ofrece una de las mejores vistas de Lyon. Con una mezcla de estilos arquitectónicos bizantino y gótico, su interior es tan impresionante como su exterior, con mosaicos y vitrales que cautivan a los visitantes.
Un oasis verde en el centro de Lyon, el Parque de la Tête d'Or es uno de los parques urbanos más grandes de Europa. Con jardines botánicos, un zoológico gratuito y un lago para paseos en bote, este parque es ideal para pasar una tarde relajante.
Este edificio, que combina la arquitectura clásica con un techo de vidrio moderno, es uno de los centros culturales más importantes de Lyon. La Ópera Nacional ofrece una variada programación de ópera, ballet y conciertos a lo largo del año.
La colina de Croix-Rousse es el barrio bohemio y artístico de Lyon, conocido por sus murales y el "Mur des Canuts", el mural más grande de Europa. Este lugar fue un centro de la industria textil, especialmente de la seda, y todavía conserva su espíritu creativo.