Ciudad de México, una metrópolis vibrante y en constante movimiento, es el centro cultural, político y económico de México. Con su mezcla única de historia prehispánica, arquitectura colonial y modernidad urbana, esta ciudad tiene algo que ofrecer para cada tipo de viajero.
La Plaza de la Constitución, o Zócalo, es el corazón palpitante de la ciudad. Rodeado por la Catedral Metropolitana y el Palacio Nacional, este lugar es ideal para sumergirse en la historia de México. No te pierdas los murales de Diego Rivera dentro del palacio y explora las calles aledañas llenas de arquitectura colonial, tiendas y cafés.
Este museo es una parada obligada para cualquier amante de la historia y la cultura. Alberga una vasta colección de artefactos prehispánicos, incluyendo la famosa Piedra del Sol. Es el lugar perfecto para aprender sobre las civilizaciones azteca, maya y otras culturas indígenas de México.
Coyoacán es un encantador barrio colonial que fue hogar de Frida Kahlo y Diego Rivera. Además de visitar la Casa Azul (Museo Frida Kahlo), te recomendamos perderte en sus calles empedradas, llenas de mercados, librerías y plazas acogedoras.
Conocido por sus canales y jardines flotantes, Xochimilco es una experiencia imperdible. Disfruta de un paseo en trajinera, un colorido bote adornado con flores, mientras escuchas música de mariachi en vivo y degustas comida tradicional mexicana.
Un emblema arquitectónico de Ciudad de México, este palacio es un centro cultural que alberga exposiciones de arte, óperas y el famoso Ballet Folklórico de México. Su cúpula dorada es un ícono de la ciudad y un lugar perfecto para fotos.